Si les dieran la oportunidad de montar bicicleta en cualquier parte del mundo, ¿en dónde lo harían? Sin lugar a dudas, los puertos de montaña míticos, de las grandes vueltas, coparían los primeros lugares de nuestras listas: Alpe d’Huez, Mont Ventoux, Passo del Mortirolo, Passo dello Stelvio, Lagos de Covadonga… En fin, tantos nombres se nos vienen a la cabeza que nos recuerdan las gestas de nuestros ciclistas en el viejo continente. La popularización del ciclismo en Colombia, en los últimos años, nos acerca a estas montañas y las convierte en parte de nuestra geografía, no nacional, pero sí personal.
En este punto, querido lector, usted se preguntará, ¿y esta retahíla a qué viene? Y la respuesta es sencilla. Montar bicicleta en estas montañas y carreteras europeas se puede hacer. Existen empresas que ofrecen paquetes turísticos para montar en bicicleta por estos parajes y las hacen coincidir con las grandes vueltas.
En esta ocasión, nos hemos reunido con Yves Millière, dueño de ‘En Bici por Francia’, para que nos cuente un poco de esta idea que tantos adeptos y aficionados al ciclismo congrega año tras año.
Yves llegó a Colombia hace casi cuatro años por motivos personales. Al asentarse en Bogotá, continuó con su pasión por el ciclismo y empezó a rodar por las rutas aledañas a la capital del país. En 2014 estaba compitiendo en pruebas máster y conocía gente que le preguntaba por el Tour de Francia. “Me decían que era su sueño ir allá, que era complicado por el idioma, buscar hoteles porque todos estaban llenos… Entonces como que ahí surgió la idea de hacer algo y cuando salió el recorrido del Tour de 2015 (en octubre de 2014) yo armé todo un plan para eso”.
Esa atractiva idea surgió de la inquietud de la gente con respecto a su país de origen, Francia. Él, ni corto ni perezoso, tras percatarse del potencial de la idea, contactó con el embajador de Francia en Colombia y organizó un evento en febrero de 2015 para socializar la razón de ser de una empresa naciente.
En esa primera hazaña al viejo continente, su meta era llevar 40 ciclistas y terminó con 44, un 10 % más del objetivo inicial. Nos cuenta, en un español perfecto, cómo planeó todo el recorrido: “La logística se organizó con nueve meses de antelación. El paquete incluyó los vuelos -aunque no es una obligación contratar con ellos- y salió más barato porque hicieron las negociaciones desde noviembre. También incluyó alojamiento, comidas -menos almuerzos- paquete turístico en París y almuerzo en Torre Eiffel, durante dos semanas”.
Con pesar, querido lector, si a usted le gustaría ir al Tour de Francia de este año, ya todos los cupos están vendidos. ¿Por qué? La razón es esta. El recorrido para un Tour es presentado en octubre del año anterior a la fecha. Desde ese día, Yves comienza a organizar la logística y en noviembre publica en su web enbiciporfrancia.com el recorrido y los cupos. Por ello él recomienda “inscribirse con bastante anticipación porque los cupos se acaban muy rápido”. Para marzo, usualmente, ya tiene vendidos todos los cupos.
El valor que se paga en este plan turístico es por la labor de logística y organización: “El precio para el plan ciclista es de €3.390. El vuelo está en €1.210 ida y vuelta. Es decir, un total de €4.600, para la primera etapa. Luego, a partir del 1 de marzo, la tarifa incrementa €100 cada mes, muy parecido al sistema empleado por los Gran Fondo”.
Cabe resaltar que los hoteles en los que se hospedan, la mayoría de veces, son de categoría tres estrellas. Igualmente, gracias a las negociaciones que se realizan con meses de antelación, se consiguen hoteles de cuatro estrellas, como será el caso de este año por dos noches en Marsella.
En cuanto a montar en bicicleta, la razón de ser del viaje, en este 2017 serán once días con un promedio de 70 kilómetros diarios. Durante el recorrido, acompaña una minivan que hace las veces de carro mecánico por si se presenta alguna avería.
Por otro lado, tres o cuatro meses previo al viaje, un entrenador de Rueda Libre contacta con los asistentes y les prepara un plan específico de trabajo para que haya una homogeneidad de nivel físico en las rutas francesas. No obstante, es claro que unos rodarán más rápido que otros, por ello se arman de dos a tres grupos, cada uno con un guía especializado para que así todos monten a su ritmo ideal.
En esas jornadas, se visitarán míticos puertos como Alpe d’Huez, Mont Ventoux, Col du Galibier, Col de Izoard, entre otros. En días de etapas, Yves explica la dinámica: “Llegamos tipo 11 a.m. y hacemos la subida a paso lento en bicicleta porque ya todo está controlado por la policía. Nos ubicamos en un sitio agradable -no tiene que estar junto todo el grupo, cada uno se ubica donde quiere- y esperamos a los ciclistas que pasan entre cuatro y cinco de la tarde”.
Asimismo, hay varias oportunidades de conocer a los ciclistas profesionales justo antes del inicio de las etapas. Allí se toman fotos, firman autógrafos y comparten un rato junto a sus ídolos en el Village Départ. “El año pasado hubo un encuentro con Sergio Henao, Winner Anacona y luego llegó Jarlinson Pantano. Con Nairo sí toca un poco de lejos, aunque también hubo oportunidad de foto”.
Para la última etapa en París, y dependiendo de ciertos factores, Yves ofrece un gran final en los Campos Elíseos de París para ver la última etapa a lo grande. Gracias a sus contactos locales, él proporciona accesos a sectores VIP con buffet, bebidas y vistas únicas del pelotón en su marcha triunfal por la calle más famosa de la capital francesa. Pequeña nota, esto tiene un costo extra de alrededor de €400.
Por otro lado, el negocio ha tenido tanta acogida, nos cuenta Yves, que hoy en día el recorrido traspasó fronteras. ¿Por qué lo decimos? Simplemente, por dos razones: primero, porque los acompañantes son de México, Costa Rica, Pánama y Venezuela y segundo, porque los recorridos ya no son solo en Francia, sino que visitan Italia y España. “En 2016 hicimos Giro de Italia con grupos de seis personas. Este año por ser la edición centenario van 33 personas. Llegamos el 20 de mayo y la primera etapa que veremos es en Bergamo y montamos todos los días hasta la llegada a Milán. Son once días y diez noches y ¡todos los días montamos!”.
El tema no queda allí. Este año visitarán la Vuelta a España también, aunque el número de viajeros disminuye a seis o siete personas, no obstante, la experiencia es la misma y se cuenta con los mismo beneficios.
Si usted es casado o tiene pareja, no tiene por qué viajar solo. El plan está pensado para ir en pareja. No significa que ambos deban montar en bicicleta, ya que para el acompañante se han diseñado recorridos turísticos en las ciudades que visitan. “Nosotros organizamos visitas a sitios turísticos con guías profesionales para los acompañantes. Entonces, mientras unos están montando bicicleta las otras personas hacen turismo en Francia y este costo es €200 más económico que el paquete de ciclismo (es decir, €4.400). En promedio salen 30 ciclistas y diez acompañantes”.
Aparte de visitar las grandes vueltas, En Bici por Francia ha incursionado en el campo de los Gran Fondos aficionados y este año pretenden asistir al Gran Fondo New York – Mont Ventoux del 20 al 28 de junio. “La carrera es el 25 y nosotros organizamos toda la parte preparatoria, es decir, reconocimiento de ruta cuatro días antes del evento, salidas relajadas para no gastar fuerzas y después del GF vienen tres días en la costa azul para montar bicicleta en Mónaco, Niza y Cannes”.
Si les llama la atención un plan mucho más íntimo junto al ganador del Tour de France de 1.987, En Bici por Francia ofrece, este junio, L’Etape 87. Se cumplen 30 años de la triple corona del irlandés, en aquel entonces ganó Giro, Tour y Campeonatos del mundo. Por ello, se ideó un recorrido de tres etapas, 350 km y más de 10.700 metros de desnivel positivo. Es del 9 al 13 de junio en hoteles categoría cuatro estrellas por un valor de €3.087 en base habitación doble o €3.687 base habitación single. Además incluye las tres comidas y acompañamiento profesional. ¡No te lo puedes perder ya que aún hay cupos!
Así pues, y en palabras de Yves, “Lo que nosotros ofrecemos es la facilidad de manejar toda la logística. Queremos que las personas no se preocupen por nada. Que lleguen al país y todo esté hecho: transportes, hoteles, mecánico, recorridos, etc”. En otras palabras, usted solo se preocupará, si es válido el término, en montar bicicleta por los paisajes más espectaculares y rutas más icónicas del ciclismo internacional.
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